Inicios:
Pareciese que, estamos ante un laboratorio de pruebas de ensayos a ver que es
mejor en el coctel del miedo a nivel mundial en estos años veinte del siglo 21,
que estamos viviendo. Todo parece un plan preconcebido y adaptado a un patrón que
paraliza como es la emoción del miedo colectivo entre las personas. Siendo la
mejor estrategia o táctica para alcanzar el estado de extenuación.
El
miedo: Entre los miedos mundiales que más aterra a la
humanidad es el miedo a la muerte, de donde radica los otros miedos, que son
consciente e inconscientes. El miedo a dejar de existir o de ser aniquilados es
un miedo instintivo de todo ser vivo como somos los seres humanos que
respiramos en el planeta Tierra. ´´ “A menudo sentimos miedo cuando percibimos
una amenaza, ya sea real o imaginaria. Puede ser una sensación muy incómoda e
incluso puede hacer que te resulte difícil pensar en otra cosa. Tal vez no lo
parezca, pero el miedo puede ser algo bueno. Estar asustados es lo que nos hace
actuar para protegernos”´´. * [¿Qué puedo hacer cuando tengo miedo? – Mental Health
America | Fuente Web: http://mhanational.org].
En
la lupa: El mundo en que vivimos es un mundo lleno de miedo a
casi todo. La historia de la humanidad fue y es y será el miedo en sus
distintos componentes de niveles o matices. Ahora estos miedos se han agudizado
hasta el punto de ser una paranoia que no deja respirar. Los señorones del mundo
saben de esta condición y lo ha practicado mucho. Pero en los actuales momentos
tenemos encima cuatro miedos que nos han sido impuesto a troche y moche para
lograr una serie de objetivos que pasan desde lo económico hasta espantarnos en
estos últimos cuatro años, comenzando esta segunda década del este siglo que
estamos viviendo del siglo 21. Veamos.
1.
Miedo
al Coronavirus + Variantes:
De la nada, supimos de un
virus que estaba en el centro de China que se dijo que con agua y jabón se
moría, desde luego eso fue con mucha suspicacia. Además, que no aguantaba más
de 30 grados centígrados. Pero, de pronto, no muy bien se conoció como un virus
y de virus pasó a ser una pandemia global sin haber pasado un tiempo como
endemia. La OMS (Organización Mundial de la Salud) sin mucha explicación, dijo
que ese nuevo virus que lo denominaron Nuevo Coronavirus 2019 se simplificó a
Covid-19. Y desde entonces el mundo del siglo 21 conoció el miedo a morir por
el contagio masivo de un microorganismo que mataba en poco tiempo. El mundo se
paralizó. Las sucesivas cuarentenas interminables, los cubrebocas o tapabocas, eran
y sigue siendo un medio casi obligado para protegerse del patógeno de ese nuevo
virus que provenía del SarsCov2 a principio del año 2000, más o menos. El comercio
se estancó. La industria estuvo a medias. Los vuelos cerraron. Los viajes y
turismo un completo caos. Sin contar que de la nada este virus se empezaba a
mutarse en variantes que tuvieron que colocarles algunas letras del alfabeto
griego. Y así, conocimos la variante Alfa, la variante Beta, la variante Delta
hasta llegar la multivariante Ómicron que no sabemos cuántas veces se
subdividió. Todo aterrorizó a gran parte de la población mundial y con mucha
razón. Es por ello que con razón fue bautizada la pandemia del miedo. Y es la
fecha que cada vez que la OMS dice algo parecido que ya está en fase terminal o
algo así, algo inesperado aparece de pronto. Y todavía tenemos la pandemia que
sigue su curso de contagio y muerte. Eso fue el año 2020 hasta la fecha
presente. Y supimos mucho del virus y no supimos nada.
2.
Miedo
las Vacunas contra el Covid-:
De pronto, cuando se nos
dijo que no había vacunas contra el coronavirus, y apareció la vacuna rusa, la
Sputnik. Desde luego, esta era la mala de la película. Se dijo que esta vacuna
era un adenovirus que no provenía del virus, pero que mataba los agentes
patógenos del SarsCov2 y por ende su primo, el Covid-19. Esta vacuna rusa al
principio costaba entre 15$ por dosis cuando otras megas empresas tenían otros
precios que pasaban más o menos de 60$. Eso parece ser un fuerte golpe a la
producción de vacunas e hizo que otras empresas bajaran el costo. Esos rusos. Y
comenzó la guerra campal de los que sí querían vacunarse contra el covid, y los
que no querían vacunarse contra el covid. Y esto está vivito hasta el sol de
hoy. Y de pronto dos bandos mundiales se daban duro con sus argumentos de unos
a favor y de otros en contra. Toda una epopeya. Un clásico. Además, sin contar
la guerra entre multicompañías vacúnales de cuál era la mejor por la marca o
por la procedencia. En fin. Y otra vez, como algo sorprendente, unos señorones
de la noche a la mañana subían sus acciones que en horas las ganancias fue astronómicas.
De esto no se habló más. Y mientras el miedo a la vacuna se propagaba lo que
era algo contraproducente que hacía un año atrás el mundo clamaba por una
vacuna, ahora la vacuna era una pesadilla de casos interminables de
consecuencias nefastas para muchas personas en el mundo. Y esto sucedió en 2021
hasta la fecha que no sabemos qué pasará, sí habrá de pasar algo. No lo
sabemos.
3.
Miedo
a la guerra:
No muy bien estábamos con el
virus y sus variantes y sus vacunas (las 3V), de algo que no se creía que iba a
suceder y sucedió la guerra en Ucrania. Esta guerra muy controversial. De pronto,
ya no estábamos al borde del virus, sino que, de pronto, estábamos con una
guerra no de Ucrania y Rusia como el David contra el Goliat, sino, del
enfrentamiento de la potencia Rusa contra la OTAN que es contra los Estados
Unidos. Y el mundo entró en pánico con un desenlace que de la noche a la mañana
ese enfrentamiento de la antigua Unión Soviética contra los propios Estados
Unidos. Cada bando dio por sentado sus argumentos. Y el mundo se dividió de la
nada en dos bandos. No importaba otras guerras que se estaban desarrollando en
el mundo. Los medios occidentales solo enfocaban hacia Ucrania. El mundo era
Ucrania. Y con y sin razón el miedo cundió por todo el mundo. Porque había que
decir que un enfrentamiento de estas dos superpotencias no queda nada por la
autodestrucción compartida. Es decir, nadie sale ganando. Y todos perderíamos la
vida de la noche a la mañana. Eso era lo que nos dejaban entrever el peligro
inminente que lo es y lo sigue siendo. Sin contar que lo que pase con el
estrecho de Taiwán y China, otro David contra Goliat desde luego, podría ser
una guerra de nunca acabar, y el caos reinaría sobre la faz de la Tierra,
porque también estas dos superpotencias de Estados Unidos y la Gran China tampoco
quedaría nada de nada, entre ellos mismos, y todo el resto del mundo. Y el
mundo en vilo con este Caballo apocalíptico con consecuencias impredecibles. Y
eso sucedió en el 2022 hasta la fecha estando en pleno desarrollo.
4.
Miedo
a la invasión Extraterrestres:
Por último, también de la
nada, se comenta de una “posible invasión de extraterrestres al planeta Tierra,
que entrarían con naves espaciales a lo parecido a las “Guerras de las Galaxias”,
con lo que ya nos tienen acostumbrados la gran pantalla o la pantalla chica de
seres de otros mundos vienen a colonizarlos. Todo a los largos metrajes de los superhéroes
que sabrán defendernos de seres raros, que de pronto atacarían a los humanos. Y
que, por lo tanto, necesitamos que alguien nos proteja de esas entidades
hostiles que vienen a vulnerar nuestro Casa Tierra, en menos de lo que cante un
gallo. Eso se piensa que traería miedo global. Los avengers o los vengadores (al
estilo de Marvel Study), entrarían en acción para salvarnos de los
extraterrestres, porque hay que culpar de algo a alguien. Esta peli está por
salir en los mejores cines, creo. Ahora bien, en lo referente a la teoría de
seres de las estrellas, y de que en este vasto universo seamos los únicos bonitos
en el espacio de multiversos o metaversos en complejidades cuánticas, en el
sentido de la teoría de cuerdas, o de los elementos dimensionales y ultra
dimensiónales, me resulta difícil de pensar que estamos solos. Dios (los que
creemos en Dios Creador Todopoderoso) ha creado mundos, y submundos, en estados
cuánticos, desde lo micro hasta lo macro. Y que todo lo que es arriba, es abajo
y viceversa. Y de todas las evidencias de seres que le llamo ángeles, tanto no corpóreos,
y corpóreos, o de cambio de formas que están entre nosotros desde hace miles de
millones de años. Si se termina de evidenciar, lo que damos como evidente, de
que es imposible que estemos solos, que solo en la Vía Láctea existen 100
millones de estrellas y que cada estrella tienen más de uno o más planetas. Y que
según estas teorías, puesto que la palabra teo-ría tiene un componente de Dios
por Theos. Y que estas entidades que se ha podido corroborar que han visitado a
la tierra desde hace millones de años, ¿es ahora que nos van a venir a invadir
o colonizar? Nada esto tiene sentido para los aficionados a la ciencia ficción o
de afición, que esto de colonizarnos para que los vengadores vengan y nos
salven. Todo para justificar cualquier cosa en nombre de los extraterrestres,
sin contar con los ultraterrestres o los dimensterrestres. Y esto está por
suceder en 2023. Esta es la comidilla que está a la palestra. Y después de
esto, ¿Qué vendrá?
Por
qué es importante: Todo indica que los potentados del mundo
siempre están fabricando potes de humo, pero, peligroso para la humanidad
porque sus consecuencias son devastadoras, o traen inconvenientes. Desde luego,
son los más pobres o desposeídos los que sufren estas calamidades prefabricadas
como una producción en serie. Ellos te presentan el problema, y, luego, vienen
a ser los salvadores de esa situación que ellos mismos han creado. Lo que sí es
curioso es que de pronto unos desconocidos se hacen ricos, o los que son ricos
se hacen más ricos, de manera que nos deja anonadados de cómo crecen sus
ganancias. Este jugueteo peligroso es para desviar la atención de sus planes maléficos,
y que nadie los acuse o mencione de algo que los desacredite, puesto que, ellos
son los buenos y desde luego que, otros son los malos de la película. Ellos sí
pueden ser los que hagan lo que quieran donde y como sea. Y sí, otros pretenden
hacer lo mismo entonces agárrense, ya tienen su villano favorito para acusarlo
o tratar de borrarlo hasta del pensamiento. No podemos seguir creyendo que los
que juegan al caos nos vengan a salvar. El mundo ha cambiado. Ya nos somos tan
ingenuos como antes. Y esto no es un juego nuevo de conspiración, de querer
decir algo anormal en la teoría del caos. La misma evolución humana hace que
seamos más entendidos que antes.
Cierres: No
podemos cerrar desde la desesperanza porque la esperanza no avergüenza. Aún, cuando,
las cosas que pasan sean de tonos subidos que se avizora en el horizonte,
nuestra arma, o herramienta, es el elevar la conciencia crística que existe en
nosotros mismos para poder superar los miedos propios, o infundados por la vida
misma, o de lo que los aparatos mundiales que nos tratan de meter en la psique
cualquier cosa con tal lograr sus fines. Solo de esta manera podremos crecer aún
con los miedos a cuesta, y estar a la altura de los retos de la tarea restante
que nos toca crecer.
En esto pensad
JAIRO OBREGÓN
27/03/2023