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Los
tres modelos sociopolíticos: El mundo actual se ha dividido, a grosso
modo, entre bloques sociopolíticos, a saber: El bloque capitalista de la
concentración de la riqueza en “unos pocos”, el bloque socialista de la riqueza
compartida “entre todos”, y el bloque –por así decirlo- neonazis de un “raza
superior o aria”. Esta última demasiado peligrosa por su alto grado de odio,
siendo estos tres bloques nacidos del centro europeísmo que ha entrampado al
mundo entero en una crisis civilizatoria.
Algo
de historia neo nazista: El gran inventor por así decirlo, o
impulsador del Nazismo (Nacional Socialismo, alemán), fue creado originalmente
por Adolfo Hitler en la Alemania Nazi, sobre todo, en la Segunda Guerra
Mundial. Los nazis no solo lucharon contra los aliados occidentales del Reino
Unido, Francia y los Estados Unidos, sino que, lucharon contra los rusos
soviéticos de la URSS. Es decir, dos corrientes distintas de la visión
socialista europea y eslava. En tal sentido, los neonazis se han expandido por
casi todo el mundo. Cuando el nazismo estaba siendo derrotado por los rusos y
los aliados occidentales, Hitler, con la ayuda del dictador Franco, de España,
viaja a Islas Canarias en un submarino con destino a Argentina, donde Perón, lo
esperaba en una parte secreta de la Pampa argentina, donde tenía unos
seguidores que conformarían el Cuarto Reich, en el mundo de la posguerra, porque
el Tercer Reich, había caído. Se comenta que Hitler intercambió tecnología por
su escape en silencio. Y se ramificaron en células enquistadas por los cinco
continentes con las ansias de poder globalizante. Sus células están en Argentina,
Chile, Canadá y los Estados Unidos. Así como Francia, Reino Unido, España,
Italia, entre otras a saber. Se autodenominan, la tercera fuerza política del
Cuarto Reich. Y cuentan con su ángel de la muerte. Algunos opinan que estos
nuevos nazis son peores que los antiguos, no es que los antiguos no fueron
peores.
En
qué consiste el neonazismo: ´´ “El neonazismo consiste en
movimientos sociales y políticos [u combatientes] militantes posteriores a la
Segunda Guerra Mundial que buscan revivir e implementar la ideología del
nazismo [tal cual como en el pasado]. Los neonazis buscan emplear su ideología
para promover el odio y atacar a las minorías, o en algunos casos para crear un
estado fascista. Es un fenómeno global, con representación organizada en muchos
países y redes internacionales. Toma prestado elementos de la doctrina nazi,
incluyendo el ultranacionalismo, el nacionalismo étnico, el racismo, la
xenofobia, el antieslavismo, el capacitismo, la homofobia, la transfobia, el
antiziganismo, la islamofobia, el antisemitismo, el anticomunismo, y el
antifeminismo [anticristianismo] buscando el inicio del Cuarto Reich.
La
negación a todo lo contrario. La negación del Holocausto
es una característica común [donde murieron homosexuales, gitanos, católicos,
protestantes, comunistas y judíos de Europa], como es la incorporación de los
símbolos nazis [como la cruz SS de la Esvástica], la supremacía blanca y la
admiración a Adolfo Hitler.
Los
neonazis ucranianos. En 1991 [a la caída de la URSS, y se
desprenden 12 naciones entre ella Ucrania], Svoboda fue fundada como el Partido
Social Nacional de Ucrania [los Nazis de Ucrania]. [Algemeiner Journal, 24 de mayo de 2013]. El partido combinó el
nacionalismo radical y las características neonazis [International Business Time, 19 de marzo de 2014]. Fue rebautizado
y renombrado 13 años más tarde como Svoboda en 2004 bajo Oleh Tyahnybok. En
2016 [después que cayera el gobierno de “neutral” de Kiev], The Nation informó
que “en las elecciones municipales ucranianas celebradas [en octubre de 2015],
el partido neo-Nazi Svobada ganó el 10 por ciento de los votos en Kiev [y poco
a poco tomaron fuerza política en Ucrania] y se ubicaron en segundo lugar en
Lviv.
Los
neonazis del batallón de Azov. El tema del nacionalismo y
su supuesta relación [que algunos objetan con todas las evidencias que les
golpea en la cara] surgió en las polémicas sobre los elementos radicales
involucrados en las protestas de Euromaidan y la subsiguiente crisis ucraniana
a partir de 2013. Algunos medios de comunicación ruso, latinoamericano,
estadounidense e israelíes han tratado de representar a los nacionalistas
ucranianos como neonazis [sobre todo esa que saluda, exalta, emula los símbolos
y lenguaje de la doctrina nazis, que dicen no ser nazis pero lo practican a
raja tabla]. Las principales organizaciones señaladas como ultraderechistas son
Sector Derecho, Svoboda y el batallón de Azov. Desde el 14 de abril de 2016, el
representante del Partido ucraniano ha sido Andriy Parubiy, el cofundador del
Partido Socialista Nacional neonazi de Ucrania. En junio de 2015, el
representante demócrata John Conyers y su colega republicano Ted Yoho
ofrecieron enmiendas bipartidistas para bloquear el entrenamiento militar
estadounidense del batallón Azov de Ucrania, llamándolo “milicia paramilitar
neonazi”. Andriy Biletsky, feje de los grupos políticos ultranacionalista y
neonazis Asamblea Nacional y Partido de Ucrania ha sido comandante del Batallón
de Azov [BBC News, 16 July 2014].
Algunos miembros del batallón son abiertamente supremacistas blancos [The Daily Telegraph, 11 August 2014]. El
grupo de nacionalistas radicales C14, cuyos miembros expresaron abiertamente
los puntos de vista neonazis, ganó notoriedad en 2018 por estar involucrado en
ataques violentos en los campos romaníes.”´´. (Wikipedia® / Artículo /
Neonazismo / Fundación Wikimedia Inc., sin ánimo de lucro / Fuente Web: https://es.wikipedia.org/wiki/Neonazismo)
La
situación ucrano-rusa no es de ahora: Cabe destacar que Ucrania
era un pequeño reino que se adhirió al Imperio Ruso desde siglos. En la
revolución Bolchevique de los años 20, Lenin, la nombra como una república de
la Unión Soviética, cuestión que no debió darse opinan algunos. Ya cuando se
disuelve la URSS en 1991, los habitantes de “Crimea” y “Donbass”, pasaron a ser
parte de Ucrania. Pero los habitantes del Donbass no quisieron ser parte de
Ucrania, pos soviética, por temor a los nacionalistas ucranianos con simbología
nazis. La región del Donbass, de habla rusa, fue maltratada por años. En el año
2014, que acaeció un cambio de gobierno “pro occidental”, y bajo esta ideología
supremacista neonazista, en esta región se autoproclamaron dos “repúblicas
independientes”, que Ucrania no reconoció, y se crearon milicias populares en
Donetsk y Luhansk, a las que Rusia las reconoció tras ocho años de
enfrentamientos con bombardeo a estas dos repúblicas, que Kiev llama
separatistas. Estas repúblicas populares, huían de los ultranacionalistas
ucranianos de corte nazis. La ONU hizo caso omiso. Y todo esto no se habló para
nada en ningún noticiero. Los ojos del mundo se taparon. Esto estaba velado.
Todo estaba listo. Las personas de esta región de Donbass, sobre todo los rusos
parlantes, han sido el blanco de los ultranacionalistas ucranianos, y por ocho
años burlaron los tratados de Minsk I y II, más los acuerdos de Normandía. A lo
cual intensificaron los asesinatos a los ojos de Rusia, sin poder hacer nada.
Hasta que los ultranacionalistas ucranianos, de corte nazi, amenazaron por
todas las redes sociales con apuntar armas nucleares a Rusia, lo que despertó
la ira del Oso. Los países occidentales “tiraron la piedra y escondieron la
mano”, y empezaron azuzar los “viejos odios de los nazis”, que se enfrentaron a
los soviéticos, más una ruso fobia que desde hace 800 años se empezó con los
viejos odios de la Europa del Este, por cuestiones limítrofes principalmente.
Todo esto ha sido el caldo de cultivo que detonó la guerra u operativo militar
de los rusos en el territorio del Donbass. Cosa que los medios siguen
escondiendo las razones para llevarnos a la Tercera Guerra Mundial, aseveramos.
El objetivo es destruir a Rusia, como lo llegó a decir, Margaret Thatcher
(1925-2014), la Dama de Hierro: “que la Unión Soviética era mejor que los
países occidentales, es por eso mismo que había de eliminarla”, y lo lograron
en el 1991. Nada es casual. Todo está premeditado al dedillo.
Lo
que es igual no es trampa: Es como si dijéramos que, todo fuese
al revés, ¿Qué pasaría si en la frontera de México con los Estados Unidos se
apostaran los rusos con armamento pesado e incluso nuclear con bases militares,
amenazando la seguridad de los estadounidenses?, ¿Les gustaría?, ¿Lo
permitirían?, ¿Qué se estuviera diciendo en los medios? Alguien por casualidad
aseveró esto, y enseguida dijeron “que ni se atrevan”, “que no se toleraría”. Y
donde está que “lo bueno para el pavo es también para la pava”, lenguaje
popular. Basta de hipocresía.
Se
destapa la olla: Una periodista reportera de guerra de
origen sudafricana, Lara Logan, destapa la olla y saca todo a la luz de la
trama de los medios occidentales, y comenta en medio de la guerra, en desarrollo,
denunciando al mundo: ´´ “En Ucrania están pasando muchas cosas de las que
nadie habla. Hay mucha deshonestidad sobre la historia de Ucrania, mucha
deshonestidad sobre el batallón de Azov,
financiado por EE.UU. y la OTAN. En las fotos se ven banderas de la OTAN y
esvásticas al mismo tiempo. Su emblema personal contiene la marca negra de su
culto, que era el emblema de las SS de los nazis. Muestra flechas, los símbolos
de la SS. Utilizan el emblema de la SS nazi. En todo el Ejército ucraniano se
puede ver este emblema de su culto en su equipamiento. Incluido las mujeres
soldado que se muestran al mundo como un ejemplo de independencia ucraniana,
espíritu, nobleza, ellas llevan este signo negro de su culto. La Casa Blanca
pretende que no importa, que solo es un pequeño número de tropas, pero que no
es cierto. Azov se ha abierto camino en el este de Ucrania con asesinatos. No
queremos admitirlo. Por eso Crimea votó por la independencia. Por eso Crimea
quería entrar con Rusia. Los medios de comunicación occidental y Occidente no
quieren reconocer la realidad. Ucrania occidental apoya a los nazis. Los nazis
de la SS tenían allí su cuartel general”´´. (Sputnik Mundo / Vía Telegram /
19-03-2022).
El
germen del odio: Todo lo antes descrito por la reportera,
Lara Logan,
denuncia la complicidad de los medios occidentales –es un antes y un después-,
y de los países occidentales, al mismo tiempo, en exacerbar el odio como
herramienta de guerra. Al usar estos viejos odios de que los antiguos nazis no
olvidan que fueron derrotados por sus archienemigos antiguos soviéticos, en
esta era después de setenta años, no tiene sentido. El odio, como germen de
guerra, se les puede devolver, porque los nazis no tienen dueño, ni se dejan
mandar de nadie, y los países occidentales creen que por la vía del odio irán a
derrotar a Rusia, están muy equivocados, y cuidado toda Europa al no poder
destruir los nazis a los rusos, se vuelvan contra los europeos y
estadounidenses, puesto que, están sembrados sus células en todos lados.
Cuidado paren esto.
Las
sanciones a Rusia: Los países europeos y los estadounidenses
al ver que el Oso mordió el anzuelo con Ucrania, e intervino con su operativo
militar en el Dombass para desnazificar y desnuclearizar a Ucrania, cosa que
como toda guerra ha dejado muertes y destrucción –cosa que nunca estaremos de
acuerdo con la guerra- se ha levantado una serie de sanciones del tamaño de la mitad del
PIB del mundo, contra todo lo que suene a ruso. Cosa que ha afectado a Rusia,
pero no como se los esperaban. La jugada de occidente de tener un nuevo
“tirano”, “dictador” y un nuevo “Hitler”, con Vladímir Putin, como otro “Osama
bin Laden”, un “Saddan Hussein” o un Muamar el Gadafi, les ha dado muchísimo
resultados, a los países occidentales. Pero, en esta ocasión, las cosas no les
han salido todo al dedillo. Las medidas coercitivas de más siete mil sanciones
a Rusia, ha hecho que Rusia se fortalezca en este ajedrez de la geopolítica del
este siglo 21. Las andanadas de sanciones han beneficiado a Rusia sin
precedentes en la historia, cosa de un análisis en otro artículo u entrega de
este blog, amigo lector que me lee.
Laboratorios
biológicos: En este conflicto con Ucrania y Rusia se destapó otra
olla peligrosa. En Ucrania existen 26 laboratorios biológicos estadounidenses
desde hace tiempo. Los rusos encontraron estos laboratorios y exige
explicaciones de qué por qué tan cerca de las fronteras con Rusia. Estos
laboratorios tienen una serie de virus peligrosos, y más letales que el
coronavirus. La embajadora estadounidense en la ONU tuvo que decir que son
laboratorios patógenos. A lo cual, China, denunció que los EE.UU. había acusado
al gigante asiático de que sea el responsable de la covid-19, y que se
pretendía que indemnizara China con unos billones de dólares por este
señalamiento. Al tal extremo que la OMS, en esta situación delicada, le pide a
Ucrania que destruya el material biológico, para que no se propaguen los virus.
Al principio del coronavirus en 2020, la misma OMS le entregó a Suiza un
material biológico muy delicado para resguardar esos anticuerpos, y poder
encontrar curas a los “posibles brotes de nuevos virus peores al coronavirus
actual”. Algunos han dicho que las distintas variantes del covid-19 pudieron
haber sido modificaciones genéticas del SarsCoV2. Para otros no es extraño que
en Hong Kong, de pronto, tengan un covid más agresivo que nadie entiende en
estos momentos. Este puede ser otro
artículo más adelante. Si esto es así, es un horror. No nos podemos imaginar si
estos patógenos lo tomaran los neonazis u otro grupo terrorista.
Acusan
a Rusia de “armas químicas”: En esta locura de los laboratorios
biológicos, que nadie sabe con qué, y por qué, tan cerca de Rusia, se abre de
nuevo el gastado discurso de las “armas químicas”, un guion que le dio
resultado en Siria, con lo cual convencieron a muchos. Ahora, como no se puede
ocultar sobre los “laboratorios biológicos” en Ucrania, se vienen con esta
arenga, expresan medios alternativos. Ya esto lo sabemos. Parece que se quiere
desviar la atención de esos “laboratorios”, que podrían caer en manos
equivocadas como los neonazis que estaban acostumbrados a jugar con materiales de
todo tipo en la Segunda Guerra Mundial, no me lo imagino amigo lector.
El
mundo se divide en dos bloques peligrosos para la paz mundial:
Esta situación de la guerra en Ucrania, por parte de un operativo militar de
Rusia para desnazificar y desnuclearizar a Ucrania, cosa que los medios callan como
cómplices. Está en juego que la línea delgada de paz se rompa. Los Estados
Unidos, están jugando junto con Europa, a los “buenos”, que ellos consideren
buenos, y a los “malos”, que ellos consideren malos. Esta dicotomía es
peligrosa para las sanas relaciones de respeto entre los países. EE.UU.
presiona a China a que se dé un disparo en su pie, al pretender desconocer a
Rusia, por lo de Ucrania. A lo cual, China, ha mostrado una relativa
neutralidad en el conflicto, cosa que Washington amenaza con sanciones a Pekín.
China aboga por una salida pacífica y negociada del conflicto, y advierte que
la guerra no beneficia a nadie. Por otro lado, existen varios países del mundo
que no quieren cerrar su comercio con Rusia, como lo es Corea del Sur, quien
mantiene buenas relaciones comerciales con los rusos. Encontramos que India ha
sido muy presionada por los EE.UU. para que no compre petróleo a Rusia, lo cual
ya compró su primera entrega y para mayo de este año su segunda entrega de petróleo.
Lo que ha logrado la política de máxima presión a Rusia, es que tanto los dos
gigantes como China e India, sean aliadas de Rusia. Esto cambia la
configuración de fuerzas en el aparato geopolítico mundial. Douglas Macgregor,
ex asesor militar de Donald Trump, en los últimos meses de su presidencia,
declaró en una reciente entrevista con Fox News que Washington no se da cuenta
de que ´´“Rusia no es Irak” y que las tácticas de intimidación no funcionan con
Moscú. “La gente ha confundido, me refiero a la gente de Washington, ha
confundido a Rusia con Irak. ¡Pero Rusia no es Irak! Rusia no es un país al que
se le pueda intimidar a voluntad. Y nos lo han demostrado de forma
convincente”. Según el ex coronel, “la guerra ha terminado” para los
ucranianos, que “han sido hechos pedazos, si bien los medios de comunicación
occidentales tratan de convencer al mundo de que se está produciendo una
derrota en las fuerzas rusas”´´. (RT /Actualidad / Vía Telegram / 20-03-2022).
Los que sigan creyendo a los medios occidentales de que los rusos están
perdiendo, como lo dijo un pastor evangélico en Maracaibo, Venezuela, que
“Ucrania es el David frente al Goliat de Rusia” están muy desinformados, y mi
estimado lector, eso no es así. Desestabilizar a Rusia es desestabilizar al
mundo entero. Rusia es la potencia mundial de energía gasífera, petrolera,
eléctrica que domina en el escenario del tablero geopolítico. Por otro lado,
acaban de anunciar que Polonia presenta la propuesta de que la OTAN envíe
“tropas de paz” a Ucrania –y, ¿cuándo la OTAN ha tenido tropas de paz?, en
todas se meten, en todos los conflictos-. A lo cual Rusia advierte que se prenderá la guerra contra la OTAN, y esto mis estimados lectores, es el comienzo de lo
que nadie quiere, la Tercera Guerra Mundial, donde no habrá ganadores. Que lo
sepa los Estados Unidos y Europa que no ganaran esta última guerra, si alguno
cree, que podría ganar EE.UU., pues, ni Rusia, ni China, ni nadie. Nadie gana,
todos pierden. Que despierten de esa fantasía los que creen que si Rusia cae, o
que si China cae, por lo de Taiwán –otro artículo, si no es por Ucrania, es por
Taiwán- ellos, los norteamericanos y europeos, no pretendan que van a ganar en
un concierto nuclear, que estalle la tierra en miles de pedazos en el espacio
sideral. Dios mío, no puede haber tanta locura de estos momentos del Homo
Demens.
Por
qué es importante que estemos apercibidos: Todo lo que hemos
podido escribir está en pleno desarrollo –como lo dice Dossier TV-. Estos
acontecimientos nos deben poner a elevar la conciencia, de que los
ultranacionalistas ucraniano de la doctrina nazi, es muy peligroso no solo para
Rusia, sino, para toda Europa y los Estados Unidos. Si estos siniestros tomarán
el mando, al que no están acostumbrados a que nadie les dirija, y si ellos, los
ultranacionalistas tomaran las armas biológicas, las armas químicas, las armas
potentes y las armas nucleares, todo el mundo estaría en grandes peligros por
el tipo de culto que tienen de exterminio. Ni los países occidentales podrían
con ellos. Los nazis están más vivos que nunca. Están diseminados en todas
partes. Cuidado mundo. No queremos muchos otros holocaustos.
Cierres. No
podemos cerrar desde la desesperanza, puesto que, la esperanza no avergüenza. Queremos
la paz, no la paz de los sepulcros. Necesitamos que baje las tensiones entre
todos los factores. No más echarle leña al fuego. Los medios dejen de alentar
los odios y las mentiras. Que gane la paz. Otro mundo de paz necesitamos.
En esto pensad.
JAIRO OBREGÓN
26/03/2022
Maracaibo, Venezuela
