Volvemos
de nuevo: Ya hace un tiempo que no analizábamos lo referente a
estos temas pendientes, sobre el ambiente, el clima, la espiritualidad que le
agregamos y hasta lo insólito de pretender cambiar la órbita terrestre para enfrentar
el Cambio Climático –“no cambiemos el
clima, cambiemos el sistema”-. Lo cierto es que, necesitamos volver a ver que
nosotros sin la Tierra no podemos vivir, y no seguir por la senda equivocada de
hacernos ver que es al revés, que la Tierra sin nosotros no puede continuar con
vida.
Tomemos
conciencia: Hasta ahora es casi nula una conciencia planetaria de
verdad. Y no me refiero al nuevo cliché de una ecología verde, que de verde, no
tiene nada. Solo buscan cambiar de formas, pero, dejando la misma situación de
deterioro de la vida misma en la Madre Tierra (Pacha mama de los andinos). Sin una
verdadera conciencia del Planeta Tierra como un Ser Vivo (Gaia) que interactúa
con nosotros, los seres humanos como parte de la tierra pensante, andante,
hablante de la tierra misma. No es que Tierra y Hombre son dos cosas
separadas, como la religión occidental nos legó, sino, que, ambos son lo mismo,
puesto que portamos los mismos elementos y la energía que mueve el mismo universo.
El
modelo de “sobre producción”: Nadie le pone el cascabel
al gato. Se habla mucho y se concreta poco. Lo que está a la palestra es el
modelo de “sobre producción ilimitada” de los “recursos naturales”, que no se
ven como “dones naturales", sino, como algo que se puede explotar constantemente
sin ninguna regulación. No nos importa mucho que la tierra está cansada de
girar con unos humanos que la estamos desangrando.
La
interpretación errónea: Hace mucho tiempo nos dividieron a la
Tierra y el Hombre, olvidándonos de los seres vivos, como los animales y los
distintos ecosistemas que en medio de todos coexistimos. Antes, de la modernidad
los nativos respetaban esa armonía donde todo era uno. Lamentablemente, la
Biblia, fue puesta para alentar esa desunión cuando se creyó que el Hombre era
el dueño o que “enseñoree” a la Tierra y verla con un objeto o baúl sin fondo. Ya
esta interpretación es no solo obsoleta, sino, anti vida totalmente. Es decir, que es la base de la muerte del Planeta (que está viejo y que no da más) y de
nosotros mismos.
Destrucción
de Ecosistemas. Durante mucho tiempo, hemos estado
explotando y destruyendo los ecosistemas de nuestro planeta. Cada tres
segundos, el mundo pierde una superficie de bosques equivalente a un campo de
fútbol y, tan solo en el último siglo, hemos destruido la mitad de nuestros
humedales. El 50% de nuestros arrecifes de coral ya se han perdido y para 2050,
podrían desaparecer hasta el 90%, incluso si el calentamiento global se limita
a un aumento de 1,5 °C. [“Alerta científica
por daños colaterales a la biodiversidad de algunas medidas contra el cambio climático”.
(El País / 10-06-2021); “El cambio climático
podría disparar los casos de amebas ‘comecerebros’ y ‘bacterias ‘comecarne’,
advierten expertos”. (RT / 02-06-2021).].
La
pérdida de Ecosistemas. La pérdida de los ecosistemas está
privando al mundo de sumideros de carbono, como los bosques y las turberas, en
un momento en que la humanidad ya no puede permitírselo. Las emisiones globales
de invernadero han aumentado en tres años consecutivos y el planeta está a un
paso de un cambio climático potencialmente catastrófico.[“Captura de carbono: ¿solución climática o mayor dependencia de combustibles
fósiles? (DW / 15-06-2021); “La
justicia neerlandesa obliga a la petrolera Shell a reducir sus emisiones de
carbono en 45%” (RT / 27-05-2021); “Francia
vota a favor de tipificar el delito de ‘ecocidio’ para castigar las agresiones
al medio ambiente” (RT / 18-04-2021).].
Covid-19
como consecuencia. La aparición de la COVID-19 también ha
demostrado lo desastrosas que ser las consecuencias de la perdida de los
ecosistemas. Al reducir el área de
hábitat natural para los animales, hemos creado las condiciones ideales para
que los patógenos, incluido los coronavirus, se propaguen. [“Cambio climático y pandemia son los dos
grandes temas de la cumbre del G7 en Cornwall, Gran Bretaña”. (DW /
11-05-2021).].
Reimagina,
recrea, restaura. Ante este gran problema, el Día Mundial del
Medio Ambiente se centra en la restauración de ecosistemas con el lema “Reimagina,
recrea, restaura”. Restaurar los ecosistemas significa prevenir, detener y
revertir este daño, pasar de explotar la naturaleza a curarla. Para ello, y
precisamente en este día [5 de junio de 2021], arrancará el Decenio de las
Naciones Unidas sobre la Restauración de Ecosistemas (2021-2030), una misión global
para revivir miles de millones de hectáreas, desde bosques hasta tierra de
cultivo, desde la cima de las montañas hasta las profundidades del mar. Solo con
ecosistemas saludables podemos mejorar los medios de vida de las personas,
contrarrestar el cambio climático y detener el colapso de la biodiversidad.
(Naciones Unidas / Día Mundial del Medio Ambiente 5 de junio / Generación Restauración:
Reimagina, recrea, restaura / Propiedad Intelectual / Fuente Web / https://www.un.org/es/observances/environment-day).
[“Punto de no retorno de calentamiento
global se habría superado”. (El Tiempo / 15-06-2021); “La humanidad sigue enganchada al petróleo, al gas natural y al carbón”.
(El País / 15-06-2021); “2021, el año
clave contra el cambio climático”. (National Geographic / 08-06-2021).].
La
Espiritualidad necesaria. Tales modos de vida y de relacionarse
son fundamentales si queremos reinventar una forma amigable, reverente y
cuidadosa de la Tierra y la naturaleza. De ahí nacerá una civilización biocentrada.
Como afirma la Fratelli tutti, fundada en una “política de ternura y de la
gentileza”, “en el amor universal y en la fraternidad sin fronteras”, en la
interdependencia entre todos, en la solidaridad, la cooperación y el cuidado de
todo lo que existe y vive, especialmente de los más desprotegidos.
Covid-19
como señal. La Covid-19 es una señal que la Madre Tierra nos envía para
que asumamos la misión que nuestro Creador y el universo nos han confiado de “proteger
y cuidar el Jardín del Edén” [sentido simbólico], es decir, la Madre Tierra
[sentido analógico]. Si juntos…Asociados a otros, se proponen realizar este
sagrado propósito, darán una señal de que no se ha perdido todo del Paraíso terrenal,
que empieza a crecer dentro de nosotros y se expande hacia fuera, haciendo, de
verdad, de la Madre Tierra, la verdadera y única Casa Común en la cual podremos
vivir juntos en fraternidad, benevolencia, justicia y paz. ¿Son sueños? Sí, son
Grandes Sueños, necesarios, que anticipan la realidad futura. (La Columna
Semanal de Leonardo Boff / Articulo / Sin espiritualidad no salvaremos la vida
en la Tierra / 12-06-2021 / Fuente Web / https://www.servicioskoinonia.org/boff/articulo.php?num=1026).
Lo
insólito e inaudito. Según Forbes, publica algo descabellado que
registra la Bioguia que ha dejado a todos de manera descabellada: ¡Insólito! En
Texas hay un político que planea cambiar la órbita de la Tierra para combatir
el cambio climático. Sus ideas sugieren que esto sería mucho más eficaz que
otras acciones, siendo una idea bastante extraña. No queda claro si el
representante republicano habla en serio. Las opiniones fueron emitidas en
medio de una audiencia con el Comité de Recursos Naturales de la Cámara de
Representantes. Fue entonces cuando Louie Gohmert hablo con Jennifer Eberlien,
subdirectora del Sistema Nacional de Bosques. La entrevista y conversación quedó
grabada, por lo que ha sido vista por gran cantidad de personas. Según Gohmert,
un ex director de la NASA le dijo que se podían cambiar las órbitas de la
Tierra y la Luna para mejorar el clima. [“El
calentamiento global ha cambiado el eje de la Tierra, según un estudio” (RT
/ 15-05-2021).].
Alteraría
el clima. Es así como el representante de Texas ante la Cámara de
gobierno sacó una idea que parece de ciencia ficción. Supuestamente, alterando
la órbita terrestre alrededor del Sol y se evitaría el calentamiento global [“enfriaría”
el planeta del calentamiento alejándola del Sol, pero si se traza mal los cálculos,
podría enfriar demasiado a la tierra; pero, si se equivocara de grados en los cálculos,
seria calentar demasiado a la tierra acercándola al Sol, toda una aventura catastrófica].
La NASA deja en claro: En dado caso, ha sido la NASA la primera institución en dejar algo en claro: la rotación y órbita terrestre no son culpables del cambio climático. Sin duda, una respuesta debida a las declaraciones de Gohmert y sus vínculos con la NASA. (BIOGUIA / Ambiente / ¡Insólito! En Texas sugieren cambiar la órbita de la Tierra para combatir el cambio climático / Fuente: Shutterstock / Fuente: UNILAD / Todos los derechos reservados / Fuente Web / https://www.bioguia.com/ambiente/insolito-texas-sugieren-cambiar-orbita-tierra-combatir-cambio-climatico_93904495.html? utm_source=www.bioguia.com&utm_medium=notifications&utm_campaign=93905616).
Cataclismo
orbital climático: La locura de sacar a la Tierra de su órbita
sería un cataclismo de escenas desconocidas que alterarían los mares, océanos, erupción
de volcanes, lluvias torrenciales, terremotos en fin. En tal sentido, el
supuesto remedio sería peor que la enfermedad. Tal como vimos que la propia
NASA advierte, que el problema no es la órbita de la Tierra y de la Luna, el
problema es el calentamiento producido por los gases de efecto invernadero de
la industria, y el excesivo carbón que contamina la atmósfera, que calienta los
océanos y daña los ecosistemas, por la mano del hombre y su locura de producción
ilimitada del consumo, despilfarro, basura, desechos que genera la globalización
que enfrentamos todos y nadie se escapa. La medida es desconcertante, de una imaginación
de la gran pantalla de cine a la que nos tiene acostumbrados la meca del cine
estadounidense. Y nadie dice cómo se haría tal cosa de sacar a la Tierra su de órbita
desde hace millones de años.
Bombardeo
atómico: Sí, piensan en usar bombas atómicas para tales fines,
nos podemos imaginar lo que eso significaría, un apocalipsis donde la radiación
contaminaría todo el planeta y todos estaríamos animales, ecosistemas, todo el
ambiente y el ser humano radiado completamente. Estas escenas dantescas de
ciencia ficción, sería la excusa perfecta para empezar una última guerra
mundial entre las potencias nucleares –que se tienen ganas- y el fin completo
de la existencia en el planeta dejando a la tierra como una roca muerta en el
espacio.
Cierres: No
podemos cerrar desde la desesperanza. No todo está acabado. Aunque usted no lo
piense, todavía podemos crear conciencia de vida planetaria donde todos estemos
bien con lo que tenemos. Aun cuando, todo sea oscuro, siempre buscaremos en
nosotros mismos la sabiduría necesaria para salir victoriosos en armonía con el
medio ambiente (que no sea medio sino completo), y que ese cambio climático todos
juntos podemos aunque de a poco, salir del atolladero sistémico en que estamos
inmersos. Pedimos a Dios y la vida que veamos tiempos mejores.
En esto pensad
JAIRO OBREGÓN
15/06/2021
Maracaibo, Venezuela
