
No podemos pasar por alto un hecho
histórico que marcó seriamente a Venezuela llamado el caracazo de finales de
febrero 1989. Hoy se cumple 24 años de este doloroso hecho que causó pánico y
muerte en el reciente periodo presidencial del señor Carlos Andrés Pérez, y de
una alta burguesía y medios de comunicación, que le vendían a un pueblo
hambriento producto bienes y servicios que jamás podían adquirir, por el paquete de medidas económicas del FMO
y el Banco Mundial, todos juntos contra el pueblo indefenso y desarmado. Eso fue
una masacre de más de 3.000 personas. La masacre fue para dar un escarmiento a
las masas enloquecidas para que más nunca se atrevieran a protestar. Ese fue el
costo de su desespero. La represión.
Ahora,
actualmente, observamos las mismas medidas socio económica en Europa, caso
Grecia, España e Italia que penden de un hilo con una serie de
cuestionamientos, de los mismos autores antes mencionados. La gente se auto
flagela, se incineran al ver que todo su esfuerzo queda a merced de los
burócratas neo liberales. Esto no es de extrañar porque provienen de la misma
teoría que hoy azota a países que se consideraban del “primer mundo” ¿Cuál es
la causa? El neo liberalismo como doctrina de Shock, de despidos masivos,
liberación de precios, de acaparamiento, recortes salariales, despojar a los
jubilados, la privatización de la salud, la educación y pare usted de contar.
Veamos.
“El neo liberalismo es una corriente
politicoeconómica que propugna la reducción de la intervención del Estado al
mínimo. Hace referencia a la política económica con énfasis tecnocrático y
macroeconómico, pretendiendo reducir al mínimo la intervención estatal tanto en
materia económica y social, defendiendo el libre mercado capitalista como mejor
garante del equilibrio institucional y el crecimiento económico de un país,
salvo ante la presencia de los denominados fallos del mercado…”[1]
Esta teoría ha socavado las esperanzas de
miles de millones de personas en el mundo. En el caso venezolano fue y es,
evidente. No podemos olvidar como esos dictámenes quebró un país como el
nuestro que llegó a ser el primer exportador de petróleo en el mundo,
subsumiendo al hambre y muerte a los pueblos pobres.
La lucha del “caracazo” venezolano de 1989
fue la marcada lucha de clases. Una elite privilegiada sumamente rica, con
poderosos medios de comunicación para sustentarse en el poder o dominio. En esa
ocasión los pobres hambrientos no pudieron con esta hegemonía a ultranza. Las
victimas todavía se cuentan. El estado venezolano ha tenido que indemnizar a
los familiares de los caídos. Nosotros vivimos esa noche neo liberal. Venezuela
se alzó con su pueblo oprimido y masacrado ante los dictámenes del FMO como
primer país que dijo no ante ese abuso de dominación. Cuando el muro de Berlín
había caído a mediado de los ochenta, el colapso de los socialismos reales de
Europa, la caída de la Unión Soviética, ese escenario del cual Francis Fukuyama
se atrevió decir que era el fin de la historia. Este pueblo pobre con una
inmensa riqueza petrolera se adelantó a la historia misma. “El 27 y 28 F de 1989
Venezuela le dio un ejemplo al mundo”[2]
Más
tarde, vimos como países Latinoamericanos se vieron inundados con este
planteamiento de desfalco y privatización, es decir, hambre para el pueblo. Argentina
pasó su noche neoliberal cuando la gente de la clase media salían con sus
trajes de etiquetas a buscar pollos desnutridos, eso lo vimos por televisión.
No lo podíamos creer. La que unas décadas pasadas se decía que Argentina era el
granero del mundo.
Los y las que por un prejuicio enconado
no ven esta situación y defienden el “libre mercado”, pero, libre para ¿quién o
quiénes? Para los bancos no para el pueblo. Ah eso no es así, mire que está
pasando en la Europa actualmente, a la contracción económica neoliberal nadie
se escapa. Los anaqueles de los supermercados podrán tener todo de todo, pero,
los pobres no lo pueden adquirir porque esta reservados para los pudientes. Los
pobres no tienen derecho de comprar y comer. Eso pasa en Europa, en cualquier
parte del mundo liderizados por tecnócratas.
El panorama político, económico y social
ha cambiado sustancialmente. Hay quienes piensan diferente. Sí eso es así, lo
respetamos, aun cuando no estaría de acuerdo. Los vientos revolucionarios están
presentes y activos, están en América
Latina y el Caribe. El que tenga oídos para oír, que oiga. Sé que no estamos
nadando en la abundancia ni mucho menos. En este continente convivimos con
grandes desigualdades socio económicas. Aquí están los ricos más acaudalados con los pobres más
desprovistos. No es que vivamos lindamente frente a esa realidad, solo que las
luchas de clases están vivitas. Todavía persisten…
NO PODEMOS OLVIDAR.
En esto pensad.
JAIRO OBREGÓN
FUNDACIÓN MISIONERA OBREGÓN
Twitter: @obregonjairo
Facebook: Fundaobregon
Obregon
2013-02-28 horas:
9:07 pm. San Francisco, Venezuela.